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Daniel Barrios
Adicionales: |
Impresión del juego:
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Este juego es realmente impresionante. El renderizado
es perfecto, lo mismo que los diagramas de las habitaciones. Todo transcurre
en un ambiente tétrico bien diagramado. El sonido es perfecto, tanto
en las armas como en la escenografía general. Pero el juego en general
no me gustó. Me pareció muy rebuscado y no muy dinámico.
La resolución no es lo que uno podría esperarse, solo 360x480,
pero cuando uno se acerca a los objetos éstos no se convierten en
cuadrados gigantescos de colores. En términos generales, muy buen
juego, pero no de los amantes de la acción a altas velocidades. Fabio: no me gusta,
muy lento y demasiado exagerados los escenarios, los bichos y las armas no tienen mucha
relación con lo que se ve, pero graficamente es muy bueno.
La sorpresa en el mundo de las 3 dimensiones,
Duke Nukem 3D es sin duda el mejor juego de acción que hay. Muy
dinámico, con una resolución de 800x600 y escenarios llenos
de realismo (como correr en las calles desiertas, tomarse un subterráneo,
entrar a un set de cine o recorrer una base lunar). Los efectos de sonido
no se equiparan al del Quake, sino que cumplen con su función básica.
El juego en red es muy divertido, tanto en cooperativo (con entradas tipo
comando) como en dukematch. Los escenarios son lo que más me gustaron
(aparte de matar extraterrestres). Recorrer lugares que uno puede reconocer
(como un cine o una librería) es sin duda lo mejor del juego. Según Fabio, este
es un juego mucho mejor que el Quake y el sonido es bastante bueno, algo que se olvida
Daniel es el efecto de las explosiones, los escenarios mucho más dinámicos y la grandiosa
posibilidad de crear escenarios propios, archivos RTS (estupideces de sonido para Dukematch)
Y otra diferencia con el Quake es que las armas y personajes tienen más que ver con el escenario y el estilo
de juego, en cambio en el anterior, los monstruos y armas no tienen mucha correlación con lo que se esta viendo.
El más nuevo juego de rally (que yo conozca) es la mejor forma de cumplir los sueños de un conductor a máxima velocidad. En este juego uno puede conducir uno de 6 autos y recorrer un total de 28 escenarios montañosos y dentro de bosques, con superficies que van desde el asfalto de pistas de carreras hasta ripio, tierra e inclusive nieve, y clima cambiante desde lloviznas y niebla hasta fuertes aguaceros y tormentas de nieve. Con una resolución máxima de 800x600 y un sonido estéreo alucinante (se pueden escuchar las piedras golpeando los guardabarros) este juego pronto se torna en una adictiva forma de conducir a máxima velocidad por los caminos más difíciles. Junto con la posibilidad de poder alterar la configuración del automóvil está el poder jugar hasta 8 personas, lo que lo convierte en un excelente medio de encontrar los mejores pilotos de juegos de carreras.
Este juego de vaqueros al más puro estilo
spaghetti western apareció muy tarde. Los gráficos no tienen
demasiada calidad y las figuras son en dos dimensiones. La única
salvedad son los vidrios, ya que se pueden romper de un disparo. Sin embargo
el punto fuerte de este juego es el sonido. La calidad de los efectos y
las voces es comparable a un disco compacto. Pero en ciertas ocasiones
esto resulta una contra, ya que su sobreuso tiene un efecto negativo, como
la repetición incesante de los malos buscando al jugador, que termina
siendo insoportable. De haber aparecido un año antes, hubiera sido
un buen impacto, ahora, al lado de los gráficos del Quake y los
escenarios del Duke Nukem 3D, es un juego como cualquier otro.
El último juego de Lucasarts y la continuación
del Dark Forces. En términos generales, es una mezcla entre el Dark
Forces y el Quake. Escenarios espectaculares y sobredimensionados con los
objetos tridimensionales al estilo Quake. Como siempre, el sonido es primordial,
logrando la impresión de estar realmente en los escenarios del Imperio.
El juego es tan complejo como el Dark Forces. Para lograr abrir una puerta
se tiene que recorrer media estación de recarga, para abrir una
válvula en un tubo de combustible se tiene que recorrer extensos
túneles que al final pasan por encima del que se quiere cruzar y
para abrir una compuerta requiere de una herramienta que está escondida
en un lugar que parece un sistema de ventilación.
La calidad de gráficos es similar a la
del Dark Forces. La resolución de 800x600 que tenía puesto
apenas se notaba. Salvo en detalles particulares, uno casi no nota la diferencia
con resoluciones menores. Además el juego se torna pesado sin una
placa 3D específica. Este es un punto en contra de todos los juegos
de Lucasarts, ya que lograr que funcione bien con el hardware es como ganarse
la lotería. Tengo una placa Diamond Stealth 3D que no reconoce,
y el procesador de 200 MHz a duras penas logra mantener el juego en forma
dinámica. Si tiene suerte podrá disfrutar del juego a pleno,
sino, tenga a mano los discos de instalación de Windows 95. Tal
vez necesite usarlos.
Para un fanático de La guerra de las
galaxias es el mejor juego de este tipo. Si su sueño es recorrer
los laberintos del Imperio y convertirse en un Jedi, este es el juego para
usted.
Esta versión disponible no es un demo,
sino mas bien un beta. Al momento de instalarlo advierte que el juego está
en etapa de desarrollo por lo que puede fallar y ocasionar problemas a
su computadora. Si no puede esperar a que salga el juego terminado y desea
arriesgarse, no se defraudará. Gráficos cuya resolución
va desde 320x200 hasta unos increíbles 1600x1200 (claro, eso si
usted tiene una Pentium II de 300 Mhz con monitor de 21" y placa de video
3D de 8 Mb, algo que yo solo puedo soñar). Como todo juego de Id,
la instalación es simple: descomprima el archivo y disfrute del
juego. La única salvedad es que requiere un controlador de 3D que
debe bajar de la Red. Si se toma la molestia, podrá jugar a 1024x768
en un monitor de 14", lo que le da una definición increíble.
Si depende solo del procesador, una resolución de 640x480 le da
velocidad con buenos gráficos.
En la primera impresión dejaron del lado
un poco el misticismo del Quake por algo más mundano. Edificios
derruidos con banderas flameantes, agua cristalina donde se puede ver el
fondo y ventanas que se pueden romper son algunos indicadores que nos dicen
que estamos en un mundo no tan místico ni tenebroso (habrá
que ver la versión final). En cuanto a los enemigos, el hecho que
esquiven las balas me pareció estupendo. Por fin un juego le da
cierta inteligencia a las víctimas. Sin embargo algunos malos me
parecieron demasiado duros para las dos armas que tenía. Ciertamente
hay que tener tres manos para poder moverse alrededor mientras dispara.
El sonido no lo pude disfrutar. Al juego solo pude hacerlo funcionar en
una máquina sin sonido, por lo que no puedo dar una opinión
certera del juego en general.
En términos generales es una buena continuación
para el Quake. Objetos más estilizados y escenarios no tan fantásticos
son una combinación que me ha gustado.
El demo de este juego no pudo funcionar ni en
una Pentium 200 con tarjeta de video de 3D ni en una Pentium 166 con 48
Mb de RAM. Seguiré imaginando qué tal es el juego.
Con el XWing tuvimos la oportunidad de convertirnos
en Luke Skywalker y destruir tantas naves imperiales como quisimos, aunque
nos dimos cuenta que era más difícil de lo que mostraban
en las películas. Con el Tie Fighter la calidad de gráficos
mejoró notablemente al tiempo que defendíamos el Imperio.
XWing vs Tie Fighter es todo esto y mucho
más. Sonido de calidad digital y gráficos SVGA para un realismo
cercano al cine. La posibilidad del juego en red ofrece alternativas nunca
imaginadas con los dos juegos anteriores. La versión de duelo es
un poco aburrida. No sé qué tal es con más de tres
personas, pero para dos jugadores que destruyen 9 naves en 3 minutos es
totalmente aburrido. Mi hermano y yo estuvimos minutos sin dispararnos,
mientras hacíamos complicadas maniobras de ataque y evasión,
sin que alguno lograra algo. En cambio el juego cooperativo es perfecto.
Cuesta coordinar las órdenes, ya que las frases como "estoy debajo
tuyo" o "a la derecha" pierden totalmente su sentido en el espacio. Sin
embargo una vez que logra ponerse de acuerdo con su compañero de
escuadrón las cosas son mas bien simples, y sin darse cuenta acabará
con oleadas de enemigos. Lo único a tener en cuenta es el no dispararse
entre si cuando van quedando los últimos enemigos.
Punto a favor es que usa los mismos comandos
que los juegos anteriores, por lo que no hay que aprenderlos de nuevo y
es necesario cambiarlos. Punto en contra es que hay que usar el mouse para
moverse por los menúes. Cuando uno se compenetra en el juego normalmente
no quiere soltar el joystick, ya que se torna una pérdida de tiempo
al ingresar otra misión o simplemente hacer la misma.
No llegué a conocer el primero, pero esta
segunda parte no está nada mal. Los gráficos no son extremadamente
complejos (a pesar de la calidad SVGA) y el manejo de los autos no dista
del antológico Test Drive. El sonido se lleva la palma, y justifica
al juego. Música ambiental dinámica que lo acompaña
durante los trayectos lo convierten a usted en un maníaco ante el
volante. Los efectos de sonido no son muy buenos, por lo que ponga la música
más alta y ni siquiera pensará en ellos.
Gran parte de los 450 Mb del CD son videos e
información de los autos, por lo que en realidad parece más
un demo publicitario que un juego. Lamento la no inclusión de marcas
como Bugatti o Lamborghini, fieles referentes de los autos deportivos.
Un juego de este tipo sin un Lamborghini Diablo es como un auto sin una
rueda. Fabio: En cambio yo sí conocí el primer Need... y sí tenía los autos que debería
tener este juego, otro detalle horrible de estos juegos de autos son las rutas limitadas, no se puede escapar uno de
los límites preestablecidos por el jugo, lo que lo hace poco dinámico, el mismo problema
que el Rally.
Comentarios por Daniel Barrios | Adicionales por Fabio Baccaglioni |