BAERGO

BOLETÍN ARGENTINO DE ERGONOMÍA
NUMERO 21 - DICIEMBRE DE 2006


     

¿ERGONOMÍA ESTRATÉGICA O ESTRATEGIAS DE ERGONOMÍA?

           

¿Qué queremos decir con ERGONOMÍA ESTRATÉGICA y qué con ESTRATEGIAS DE ERGONOMÍA? Comencemos con la primera expresión, ERGONOMÍA ESTRATÉGICA. Nadie discute, actualmente, la importancia de la planificación y la dirección estratégica en las organizaciones de cualquier tipo, tanto estatales como privadas. Mientras que la planificación estratégica consiste (en una muy breve síntesis) en efectuar prospecciones de los entornos de la organización por medio de la construcción de escenarios posibles, entre los cuales se seleccionan los escenarios deseables, y a partir de los mismos y de la "visión" de la organización que les corresponde, en establecer los correspondientes planes estratégicos de dicha organización, la dirección estratégica le agrega a lo anterior el seguimiento y control de la evolución de esos entornos, así como la programación y realización de las acciones estratégicas previstas en los planes y la eventual modificación de estos últimos de acuerdo a la evolución real de dichos entornos. En pocas palabras: en tanto la planificación estratégica es indicativa, la dirección estratégica es además resolutiva y proactiva.

                     

Tanto en la planificación estratégica como en la dirección estratégica juegan un papel primordial los recursos humanos de la organización. Tanto es así que diversos autores hablan de "planificación estratégica de los recursos humanos" o aún de "dirección estratégica de los recursos humanos". Pero también el aspecto tecnológico asume un fuerte protagonismo y así se puede hablar de "evaluación estratégica de tecnologías". ¿Dónde se superponen ambos criterios? Pues sencillamente en los Sistemas Hombre(s)-Máquinas (SHM), tal como están definidos por la ergonomía. Aquí es importante recordar que la planificación y la dirección estratégicas son estructuradas por medio de la noción de sistemas jerárquicos, en los que un sistema de cierto nivel jerárquico está siempre incluido en un sistema superior al mismo. Por ello, la planificación o dirección estratégica de los recursos humanos y de los recursos tecnológicos deben ser integradas congruentemente dentro de la planificación y dirección estratégica de la organización. La ergonomía asume así un importante papel estratégico dentro de la organizacón pero a la vez está supeditada en sus concepciones y aplicaciones a la estrategia global de esa misma organización, constituyendo lo que hemos denominado ERGONOMÍA ESTRATÉGICA.

                  

Por su parte, la expresión ESTRATEGIAS DE ERGONOMÍA involucra a todas las posibilidades de diseño que se puedan emplear en la estructuración de los SHM. Estas posibilidades van, por ejemplo, desde los SHM muy simples desde el punto de vista tecnológico (y por ello de menor inversión en ese tipo de recursos, a la vez que de alta utilización de los recursos humanos) hasta los más sofisticados SHM (automatizados al máximo, en los que existe una gran inversión en recursos tecnológicos pero así mismo una mucho menor utilización de recursos humanos). Las estrategias de ergonomía abarcan así un gran abanico de opciones para el diseño de los SHM.

                 

¿La ERGONOMÍA ESTRATÉGICA se opone a las ESTRATEGIAS DE ERGONOMÍA? La respuesta a esta pregunta dependerá de la ubicación ideológica y laboral de los ergónomos. Si un ergónomo trabaja en una organización tendrá la obligación (naturalmente, dentro de sus propias normas éticas) de respetar a la planificación y a la dirección estratégica de la misma. Por ello, de entre todo el profuso abanico que le brindan las estrategias de la ergonomía preferirá para sus estructuraciones de los SHM a aquéllas que resulten compatibles con dichas planificación y dirección estratégicas organizacionales. Su ergonomía será, entonces,  una ergonomía estratégica. Si, por el contrario, el ergónomo es independiente en la práctica de cualquier organización, elegirá dentro de las estrategias de la ergonomía a aquéllas que le indiquen sus propios paradigmas. No corresponde denominar a su ergonomía como ergonomía estratégica desde el punto de vista organizacional.

               

¿En qué se traduce esta diferencia de conceptos? Entre otras cosas, sobre todo en la evaluación multidimensional de las distintas alternativas ergonómicas de estructuración de los SHM desarrolladas por el ergónomo. Si el mismo se encuentra trabajando dentro de una organización, sus factores de decisión y las relevancias de los mismos le estarán indicadas ya por la estrategia de esa organización. En cambio, si fuera independiente de cualquier estructura organizacional de aplicación, tendrá mucha mayor libertad para seleccionar a los factores de decisión que utilizará en sus evaluaciones de alternativas ergonómicas y especialmente para asignarles a los mismos sus respectivas relevancias. Y de aquí surge un problema que resulta reiterativo en la ergonomía: la alternativa ergonómica seleccionada por la "ergonomía estratégica" dentro de una organización no coincidirá con la alternativa ergonómica preferida por un ergónomo independiente. Esta diferencia se nota sobre todo en los encuentros entre los ergónomos "de organizaciones" (especialmente si esas organizaciones son empresas con fines de lucro) y los ergónomos "académicos", como cualquiera que asista a los congresos de la especialidad podrá constatar. No haremos aquí juicios de valor sobre este hecho real; solamente queremos clarificar el por qué del mismo, ya que muchas veces sorprende a los propios ergónomos.

 


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