Tener al señor en tu vida significa
sentir paz y consuelo en tu corazón al descender el camino de la vida con todos sus
altibajos.
Significa que puedes ofrecer tus plegarias a un Padre amoroso y compasivo, que siempre
tiene tiempo de escucharte y nunca deja de comprender los dolores y temores que se
esconden en los rincones de tu alma...
Tener al Señor en tu vida significa tener la seguridad
de que no hay dificultad que pueda sucederte que tú y El,
uniendo fuerzas, no podáis enfrentar
y al final conquistar. A pesar de las
lágrimas, del dolor y de los malos tiempos
que conocistes y que sin duda volverán de
vez en cuando, tú sabes que El está presente en todo
y que las cosas acabarán siempre por arreglarse.
Significa que puedes estar plenamente convencido, sin duda
alguna, de que te dará la fuerza de soportar cualquier cosa que te suceda, y
que de experiencias amargas saldrás reforzado.
Aunque todas estas bendiciones son esenciales para nuestra existencia diaria en la tierra,
son pequeñas cuando las comparas con la promesa de pasar la eternidad en Su
presencia.
Por eso, lo que significa tener al señor en tu vida es conocer la bendita esperanza del
futuro y la gloriosa promesa del paraíso que El ha preparado para nosotros!