C O N T E N I D O

Introducción
  1. Elementos Básicos


  2. Arreglos Caseros


  3. pH Recomendados


  4. Inicio del Cultivo


  5. Entorno del Cultivo


  6. Cultivos en Agua


  7. Carencia de Iones


  8. Control de Plagas


  9. Cultivos Florales


  10. Calendario de Siembras


  11. Plantas de Sombra


  12. Soluciones Nutrientes


  13. Otros Vínculos


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6. Cultivos en Agua

La ciencia del cultivo de plantas sin suelo se conoce desde hace más de cien años y la palabra hidroponía es comparativamente nueva, desde que el doctor W. E. Gericke la acuñó en fecha relativamente reciente.
El verdadero cultivo hidropónico es generalmente un medio de cultivar plantas en una solución nutriente sin suelo u otro medio enraizante.
Hoy, la mayoría de los muchos métodos de cultivo de plantas sin suelo, emplea varios tipos de materiales inertes, como medio enraizante solamente.
Yo he descartado, por el momento, el uso de sustrato y me he dedicado exclusivamente al cultivo en agua, en una escala muy reducida, de acuerdo a las disponibilidades de espacio físico adecuado para el manejo de las plantas.
Mi sistema es más bien sencillo, pero me ha reportado enormes satisfacciones y una fuente de entretención fascinante.
Los nutrientes yo los adquiero en la Semillería San Alfonso, calle San Alfonso N°31 de Santiago de Chile (se gastan US$2,5 para 250 litros de solución). La caja tiene un aspecto como el que se muestra en la figura adjunta y su composición es la que aquí se indica.

N - P - K Fertilizante
10-10-27
Análisis
Nitrógeno 10%
Acido fosfórico soluble 10%
Potasio 27%
Magnesio 1,3%
Azufre 4,8%
Hierro 0,4%
Calcio 3,8%
Manganeso 200 ppm


Uno de los montajes que he hecho, es como el que se muestra en la Figura 4 y consiste en:

  1. Un estanque opaco de plástico (Figura 4), de 60 litros de capacidad, en donde se prepara y se corrige el pH de la solución que alimentará las plantas.

  2. Un pH-meter de bolsillo

  3. Un contenedor de poliestireno expandido (Figura 4, plumavit) de 60 litros de capacidad (30 cm de ancho por 25 cm de alto y 80 cm de largo, medidas interiores), que ha sido recubierto interiormente con una lámina de plástico tipo nylon de mínimo espesor (puede ser una bolsa de basura negra sin orificios), con el objeto de asegurar la estanqueidad del depósito. La lámina interior no tiene que estar necesariamente pegada a las paredes; el peso del agua le da la forma final. Solo es necesario sostener los bordes superiores.
    Si el contenedor no es lo suficientemente fuerte, habrá que poner algunos refuerzos transversales de cinta de envolver u otro material, porque en caso contrario, con el peso del agua, se deformará.

  4. Tapa de madera prensada (5 mm de espesor aproximadamente) con 5 agujeros de 3 cm de diámetro, (ver Figura 5) y un agujero en un extremo de 2 cm de diámetro para dar acceso a la solución.
    Por el lado interior de ella, he pegado con cinta de envolver, pequeños trozos de poliestireno expandido (plumavit) de 5 cm x 5 cm y 1 cm de espesor, con un pequeño agujero en el centro, concéntricos a los agujeros de 3 cm de diámetro, con el objeto de proveer el sostén inicial a las pequeñas plantitas en sus primera semanas de vida. La idea es que en la medida que el tallo se desarrolle, vaya ensanchando el agujero de la poliestireno expandido (plumavit), si que se dañe la planta.

  5. Un reloj controlador (Figura 4, timer)

  6. Bomba aireadora (Figura 4) adecuada para una pecera de 60 litros de capacidad

  7. Manguera de plástico de 5 mm de diámetro interior, o adecuada a la boquilla de la bomba aireadora (del tipo de combustible de automóviles) para el burbujeo del aire dentro del contenedor de plantas. La manguera ha sido perforada en distintos puntos (4 ó 5) a lo largo de ella, para obtener un burbujeo más suave y mejor distribuido dentro del nutriente. Al extremo de la manguera se le debe adosar un peso, de forma de mantenerla constantemente sumergida a fondo del contenedor.

  8. Una manguera de jardín (1/2" de diámetro) de 2 m de largo para, mediante sifón, llenar y reponer el nutriente al contenedor y también para retirarlo de él, periódicamente.

  9. Dos banquetas de apoyo a los elementos, de altura conveniente para ejecutar con facilidad el trasvasijo de soluciones mediante sifón.

Operación


  1. Una vez obtenidas las plántulas desde un semillero propio o adquiridas en algún vivero, se instalan delicadamente sobre la plancha de la Figura 4, cuidando que las raicillas atraviesen perfectamente las perforaciones de los trozos de poliestireno expandido, adosados a la parte inferior de ella, a una altura tal que el "cuello" de la planta (punto de unión entre el tronco y las raices) quede aproximadamente al nivel del nutriente que ya está dentro del contenedor (no olvidar que se recomienda que la altura de la solución debe ser 1,5 cm bajo el borde superior del recipiente).

  2. Programar el timer para que active a la bomba de pecera 3 veces al día por un período de 3 a 4 horas cada uno, como mínimo, de forma de asegurar una excelente aireación de la solución; si ella tomara mal olor o se pusiera turbia, significa una mala oxigenación y habrá que aumentar el ciclo de venteo.

  3. Periódicamente (cada dos o tres dias al principio, y cuando las plantas tengan un mayor desarollo, todos los días) verificar el nivel de la solución, y agregar de la misma solución rica, lo que sea necesario para recuperar el nivel deseado.

  4. Esporádicamente (en un principio, cada 30 días, y después, cada 15) proceder al vaciado total de la solución empobrecida del contenedor, y reemplazarla por nueva solución rica. La solución de descarte puede ser usada en el jardín, ya que algo de nutrientes aun contiene.

  5. Observar cuidadosamente el desarrollo de las plantas y enventuales problemas que ellas presenten, especialmente lo que dice relación con enfermedades o carencias de ciertas sustancias.

  6. Llevar control de las fechas en que se van produciendo los acontecimientos más importantes, de modo de tener un registro claro de lo sucedido, para que sirva de documentación para el próximo ciclo.

  7. Las plantas que son de desarrollo en altura (tomates, habas o porotos, por ejemplo), obviamente que necesitarán tutores, que el cultivador deberá proveer en el momento oportuno.




    Algunos ejemplos de tutores se muestran en las fuguras adjuntas, en el bien entendido que la imaginación humana es infinita y Ud. podrá crear los suyos.