Cocinar un plato de pasta es realmente sencillo. Basta con seguir estos diez trucos para prepararla tal y como lo hacen en Italia, la cuna de la pasta.

1. En primer lugar, hay que cocer la pasta en abundante agua salada. Un litro de agua por cada 100 grs. de pasta.
2. La sal, siempre en esta proporion : una cucharada sopera por cada dos litros de agua.
3. Para asegurarnos de que la pasta no se pegue entre sí o al recipiente, añadiremos unas gotas de aceite al agua donde vamos a prepararla.
4. Por el mismo motivo, pondremos la pasta en el agua cuando ésta comience a hervir, manteniendo siempre la temperatura de cocción.
5. Por supuesto, la pasta debe comerse "al dente". Esto significa que la parte central de la pasta no esté cocida del todo y tenga cierta consistencia. De cualquier forma, en los envases de Barilla podrás ver el tiempo exacto de cocción de cada variedad de pasta.
6. Cuando la pasta está "al dente", se vierte un vaso de agua fría sobre el agua cociendo para terminar la cocción.
7. No es conveniente escurrir la pasta, todo lo contrario, hay que dejarla con un poco de agua de la cocción.
8. Cuando pongamos queso parmesano para acompañar la pasta, debemos cuidar de rallarlo grueso si va con pasta corta y fino si va con pasta larga.
9. No debemos poner parmesano en los platos de pasta con salsas cuya base sea el aceite, o cuando el plato lleve algún pescado o marisco.
10. Las salsas cuya base es el aceite, se utilizan generalmente para acompañar la pasta larga, mientras que las salsas de crema suelen ir con pasta corta.